12 may 2015

REUNIONES FAMILIARES DE ADULTOS.

En los siguientes puntos, hago una crítica de situaciones que me han sucedido y que me han incomodado mucho, lo comenté con una amiga y ella me dio la razón, quizás haya alguien que no va estar 100% de acuerdo, pero allí les va para que reflexionen sobre lo que creo no se debe hacer en las reuniones familiares de adultos:

PRIMERO, es de muy mal gusto ir con NIÑOS a una reunión de adultos, si sabes que la reunión se prolongará más de las diez de la noche, ¿cómo se te ocurre llevar niños?, ¿acaso no respetas a tus hijos?, ¿acaso las personas más importantes para ti no son ellos? Llevar niños a una REUNIÓN DE ADULTOS, es una falta de muy mal gusto y un descuido como padre o madre que eres.

 SEGUNDO, que los invitados lleven mascotas es la cosa más inverosímil que me ha sucedido; pero es que estas personas – que suelen ser familiares y/o amigos y uno no sabe cómo decirles lo mal que uno se siente por esa falta de desconsideración -  ¿no piensan que están yendo a una reunión donde se va conversar, quizás comer y tomar y se les ocurre llevar animales?

TERCERO, llevar invitados extras. Esto es una cosa chusca, que no sé en qué cabeza sucede. Si tú eres una invitada/o solo te han invitado a ti, quizás en la tarjeta diga “y familia”… perfecto, han considerado a tu familia, creo que han considerado a tu núcleo familiar – tu esposo o esposa – pero que hagas esto extensivo a toda tu parentela, me da vergüenza ajena.

CUARTO, quedarte hasta las últimas consecuencias; o sea cuando ya los dueños de casa están que quieren ir a dormir, y tú sigues allí – pesada/do -. ¿Qué esperas?, que te digan ¡vete!, pues no, nadie te va decir ¡vete!, porque aquí en Lima, somos muy hipócritas, y es seguro que quieren decirte, ¡vete!; pero no lo van hacer y se tragarán su incomodidad y te aguantarán con una sonrisa torcida.

QUINTO, si vas a una reunión, vente con lo mejorcito que tienes. Puede que uno sea pobre, pero no te vas a venir pues con cualquier cosa. En este punto puedo ser muy malo; pero de todos modos, si no tienes que ponerte, yo te diría mejor no vengas.

SEXTO, si tienes migraña – a mi me sucede que gente que no guarda las normas de cortesía en una fiesta me provocan migraña y por eso me voy – no vayas, cómo se te ocurre ir a una fiesta para estar con tu cara de palo. No, no te incomodes, mejor quédate en tu casa.

SEPTIMO, una cosa muy elegante, si eres un caballero, es llevar una botella de vino. En el caso de las damas, no les voy a pedir que lleven un postre, a nuestras condiciones y costumbres no le da para más; pero al menos no seas chismosa. 

Estoy seguro que si observan estas cosas, la van a pasar muy bien en la reunión.