Maricruz Rosmery Tello Ríos es una chica que conocí en el instituto
Argentina - institución pública que se encuentra en la av. Alfonso Ugarte –
cuando estudiaba Administración. Ella tiene 24 años y gentilmente me aceptó
esta conversación.
Recuerdo que no te
tenía mucha confianza, me parecías una chica media relajada, por tu parte ¿cuál
fue la impresión que tuviste al verme?
Que eras un chico serio, que le gustaba refutar a los profesores
y terminabas la clase refutando al profe, a pesar que ya había acabado la clase.
¿A qué compañeros
recuerdas y de qué manera?
- Hernán Yllanez: era alegre y buen compañero, enseñaba y apoyaba.
- Daniel Sánchez: Chacotero, relajado.
- Jesús Osorio: presunto filósofo y serio.
No llegaste a
terminar tus estudios, ¿por qué?
No me llegué a inscribirme al sexto ciclo porque me faltó una
nota y luego tenía que esperar un año para poder llevar el curso, cosa por
motivos de trabajo tampoco pude hacer. No he concluido con la carrera pero
tengo planes de hacerlo para el próximo.
¿Es cierto que en
nuestra promoción había grupos de estudiantes que pagan a profesores para
aprobar sus cursos?
Sí, recuerdo de los “tesoreros”, y si mal no recuerdas tu
amigo era uno de ellos.
¿Pagaste alguna vez?
No.
El instituto
Argentina para mí fue una experiencia educativa atroz, aunque ya tenía la mala
experiencia de la Cantuta – institución pública – no pensaba que algo peor me podía
pasar. ¿Qué te pareció estudiar en el Argentina?
No era lo que yo pensaba, tenía intención de aprender más
gestión y sacar provecho para ascender en mi trabajo.
¿A qué buenos
profesores recuerdas?
Utercho, era uno de los profesores que dominaba su tema.
José Taffur, profesor de Legislación tributario.
Etelvina, profesora de administración y marketing.
¿Qué profesores no te
agradaban?
El único: Nemi, porque no enseñaba nada, no sabía su tema,
explicaba cualquier cosa y finalmente cobraba.
De los demás, ya me olvidé sus nombres.
¿En qué trabajas y
cómo te sientes allí?
En una cafetería de un grifo Primax. Vengo laborando 4 años.
Al comienzo era interesante porque tenía la opción de crecer laboralmente,
ascender de posiciones; pero ahora veo que ya no es así. Además, no me facilita
para estudiar alguna carrera. Para fin de año acaba mi contrato y tomaré dos
semanas de vacaciones, para decidir qué hacer en adelante con mi vida laboral.
¿Empezaste como grifera
en Primax?
Sí, estuve seis meses, pero era un trabajo muy estresado. Me
demandaban hacer sobreturno y no tenía descanso así que me retiré por dos
meses. Regresé como impulsadora y luego ascendí a encargada de cafetería.
¿Cuéntame algo
anecdótico de tu trabajo como grifera?
Cuando trabajé como grifera lo
hacía en Magdalena y un día, una señora me paga con 100 dólares, cosa que no
está permitido – solo aceptamos hasta 20 dólares, por el temor de que sean
falsos - así que le di vuelto de los 50 dólares y me faltaba entregarle 50
dólares, cuando regresé a mi isla – surtidor de combustible – ya no estaba, así
que me quedé con el dinero pero con la finalidad de devolverlo. Felizmente
nunca apareció.
¿Cuáles son tus proyectos de aquí a 5 años?
- He estudiado un ciclo en Cibertec, y pienso terminarlo, así que para el próximo año retornaré a mis clases de computación e informática.
- Estudiaré teatro, ha sido mi anhelo desde siempre y ahora que me dices que puedo estudiarlo en el MALI lo haré y quien sabe, más adelante, llevarlo como carrera profesional.
- Por otra parte tengo un proyecto personal para tener un ingreso que me de cierta holgura económica.