27 ene 2015

La nueva sede del Banco de la Nación

Difusión
El año pasado tuve la experiencia de ser cliente del Banco de la Nación, y esto por pura obligación ya que estuve trabajando vía CAS para el Estado. Esta experiencia – de ser cliente del BN – es sufrible porque se demoran demasiado en su atención. Para mi caso, no soy un cliente requirente, solo quería retirar mi dinero, pero ante la falta o inoperatividad de los cajeros multired – porque muchos están fuera de servicio y los que funcionan, así como los agentes, se les acaba los fondos rápidamente -, tuve que hacer mi cola para ir a una agencia de atención en más de una ocasión y estas colas me recuerdan a las que – según cuenta mi padre – se hacían en el primer gobierno de Alan García.

No sé a qué se debe la falta de agentes y cajeros multired, así como la lenta atención en las agencias del BN – quizás el banco más importante del país, al menos es la entidad financiera nacional estatal  -, pero es problema de su administración. Esta misma administración no cuenta con una sede principal, puesto que su sede anterior fue demolida para la construcción de su nueva sede principal.

Sobre la construcción de la nueva sede principal del Banco de la Nación – motivo de este artículo – se ha criticado principalmente la participación de la OIM[1] como organismo conductor del proceso, lo cual implica su intervención en los procesos de selección de la empresa constructora, la empresa supervisora y en el desembolso de los recursos durante la ejecución de la obra. Esta crítica se debe a una simple lógica, qué hace un organismo especialista en migraciones conduciendo un proceso de una de las construcciones emblemáticas del gobierno de Ollanta Humala.

A la anterior crítica, se suma que la OIM por ser un organismo internacional evita la fiscalización de las obras por parte de la contaloría general de la república, que por ese motivo no puede auditarla. El mismo Pedro Pablo Kuczynski en una ocasión criticó al actual alcalde de Lima porque “durante su primera gestión pagó S/ 44 millones por comisiones a la OIM para evitar la fiscalización de las obras que realizó entre el 2003 y 2010[2]

Tratando de ser positivos, se puede agregar que este coloso que se construye, lo está ejecutando la empresa  nacional COSAPI, que será el edificio más alto del país con su más de 130 metros de altura y que espero que al tener una sede con todas las condiciones tecnológicas[3] mejore en su atención a sus caseros así como a sus clientes golondrinos.

Aquí algunos datos que he podido rescatar del Portal de Transparencia del Banco de la Nación, la Constructora COSAPI y algunos diarios:









[1] Organismo Internacional para las migraciones.
[3] Este proyecto tiene una certificación LEED y su construcción cuenta con tecnología de punta. 

26 ene 2015

CENTRO DE CONVENCIONES DE LIMA


Hoy navegando por Internet, especialmente por los principales diarios del país: La República, El Comercio y Gestión – creo que son los principales, pero quizás no los más leídos. Me enteré que Lima podría convertirse en el centro financiero de la región gracias a la construcción del Centro de Convenciones de Lima en el distrito de San Borja.

Esta obra es del actual gobierno y no ha dejado de tener críticas, como en el diseño y también en el costo de la construcción (posiblemente la empresa que se adjudicó la construcción de la obra, Constructora OAS, tuvo la más costosa oferta para el país en S/ 6.5 millones) – esto lo leí en un diario aprista: Correo, definitivamente no podía ponerlo como uno de los principales diarios del país.

Aquí les dejo datos relevantes de una construcción que – a mi subjetividad – contribuirá más a la contaminación visual de la ciudad:

  • Gobierno: Ollanta Humala.
  • Ubicación: San Borja.
  • Área: 10, 684 m2
  • Superficie Construida: 80, 063.51 m2
  • Espacios: 18 salas

- Sala mayor de 5250 m2
- Sala menor de 150 m2
  • Aforo: 10 000 personas
  • Capacidad vehicular: 1 000 vehículos.
  • Constructora: CONSTRUTORA OAS S.A.
  • Inversión: 534, 8 millones de dólares

- 499.3 millones de dólares corresponden a la elaboración del expediente técnico, ejecución de la obra y equipamiento.
- 21.2 millones de dólares corresponden a la supervisión.
- 14.3 millones de dólares corresponden a la gestión del proyecto.
  • Plazo de construcción: 17 meses y medio.
  • Evento de Inauguración: Junta Anual de Gobernadores del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (Oct. 2015).

(Difusión)



9 ene 2015

Edison Pareja Escalante

Edison, fue mi compañero en el Instituo Tecnológico Público Superior Argentina, solo estuvo conmigo por un par de ciclos y ha accesido a tener esta entrevista. 

¿Bebes?
Sí, pero se medirme, no soy de embriagarme aunque sí lo hice antes y hace poco también después de mucho. Se siente bien, porque vives el momento, sientes otras energías y tienes otros comportamientos. Todo depende del momento y las personas con quiénes estás, cuando bebo prefiero la cerveza.

Me dices que trabajas en un bar, ¿es tu negocio?
No, es el negocio de mi padre. Tenemos casi un año de haberlo implementado.

¿Es peligroso trabajar en un bar?
No, solo es un poco tenso por el tema de la atención  y del estado de los clientes. Aunque la mayoría de mis clientes son frecuentes, incluso ellos vienen casi todos los días. No son alcohólicos, son gente que toman su bebida: uno, dos, tres y se van. De embriagarse, eso lo hacen los fines de semana.

Entiendo que la mayoría de los bares siguen trabajando después del horario permitido, ¿cómo haces tú?
Cuando tú cierras un negocio de una pollería, tienes que esperar a que tu cliente termine. Así es en mi caso, yo como administrador tengo que atender a mi cliente, a que termine su copita; si desea más, ya cerrado, puedo atenderlo internamente.

¿El mayor ingreso de tu familia es por el bar?
Sí, porque hablando solamente de la máquina el ingreso es regular. Ahora, nosotros solo vendemos cervezas, la gente viene por cerveza; y por allí uno que otro al mes, viene por su ron Cartavio que les cuesta 20 soles.

En cierta oportunidad estuve en un bar donde me sirvieron unas Pilsens y las sentí como si no fueran originales, ¿te han ofrecido alguna vez fraguar las cervezas?
Sí, el depósito con que trabajaba, no era directo de la Backus, para esa época solo vendíamos 10 a 15 cajas – ahora vendemos mucho más -, y sí me lo propusieron, me dijeron que me darían a la mitad de precio la caja. Pero no lo hemos aceptado porque en unas ocasiones nos ha pasado que hemos vendido unas papitas en mal estado – y esto por descuido – y hemos tenido problemas, entonces si eso que es por 50 céntimos nos trae tantos problemas, me imagino qué podría suceder con lo otro. Ahora nosotros compramos de la Backus, y aún así chequeamos, así traigan 20 o 30 igual nosotros chequeamos todo. Aunque, sí nos ha pasado que una que otra botella ha venido mala, cuando me sucede eso simplemente la cambio.

¿Qué es lo más gracioso que te ha sucedido en el bar?
Recuerdo cosas incómodas, como que la gente falte el respeto a la pareja de alguien; pero lo que hacemos nosotros, sucede el caso, nos percatamos y hacemos que se separen, les advertimos, y si siguen lo retiramos; y si se porta mal ya para otra ocasión ya no lo dejamos pasar, no queremos gente que falte el respeto. Cuando la gente sale, le pedimos que se vayan al baño, porque no queremos que se orinen en la calle.

Antes de trabajar en el bar, ¿a qué te dedicabas?
Tenía un negocio de fast food fuera de Lima. Me gusta los negocios, estoy estudiando administración en la Universidad Privada del Norte a través del programa “adultos trabajando”. Como recuerdas, estudié “Administración” en el Instituto Argentina contigo.

Claro, aunque no terminaste con nuestra promoción. ¿A quiénes recuerdas de la época del instituto?
De recordar,  a la mayoría aunque no los he tratado; pero tengo una buena amistad con Henry “el Chino”, con él me encontré cuando reingresé al instituto.

De algunas personas que destacaron de mi segundo grupo, aunque no por cuestiones netamente académicas, creo que sería Benjamín Carhuamaca y Teresa Ojedas,

Cuando estudiaba en el Instituto Argentina, recuerdo que académicamente los profesores no eran exigentes, no me sentía cómodo por estar allí, pero era lo que tenía al alcance. Ahora que estoy en una universidad privada, siento que son más exigentes, aunque también – creo que por la edad – ahora soy yo mismo quien más se exige. ¿Qué diferencias encuentras tú entre tu experiencia en el Argentina y ahora que estás en la universidad?
 La diferencia es abismal, aunque no te puedo decir mucho porque recién estoy tres semanas. Obviamente, todo es más ordenado, todo se cumple e incluso la infraestructura es mucho mejor.

Es algo que a mí me molesta mucho, porque me vi en la situación; dime, ¿supiste sobre los profesores que jalaban con el objetivo de cobrar a los alumnos por pasar el curso?
Sí, es una cosa que todos en el Argentina saben, yo estudié Computación e Informática en el 99, y tuve problemas con el curso de matemática, me enteré que a través de un compañero podía pagar para aprobar, lo hice. Yo tengo una ley, me lo dijo más un profesional: “Rompe las barreras, para poder llegar a algo tienes que violar algunas normas, no te vas a quejar al ministerio, nadie en este mundo te va hacer caso”.

Yo me jalé un ciclo cuando estudie computación, para ese entonces sí había escuchado sobre los pagos, pero como era joven estaba limpio de ese tema, no lo hice, repetí el ciclo. Cuando fui con mis padres, les lloré porque había fracasado, sentí impotencia y les conté lo que hacían en el instituto, y ellos me dijeron que por qué me quedé callado que ellos podrían ayudarme. Es algo negativo, pero los padres te apoyan en las buenas y en las malas.

¿Has hecho alguna locura que puedas contar?
Hice algunas locuras pero no quiero contarlos.

¿Qué piensas que pasará de aquí a cinco años?
Pienso que estaré comprometido, que tendré un negocio, que voy a estar unido a mi familia.

¿Qué es lo que has visto o que te molesta en una persona mayor que no quisieras tú hacer a esa edad?
Estar solo.


1 ene 2015

Acerca de los Presocráticos*

El presente organizador visual, está basado en "Apuntes de historia de las matemáticas vol. 1, no. 1, enero 2002".




* Una contribución del estudiante Jimenez Abad.